Para cuando te acuerdes de mí, sólo seré polvo, que el viento
esparcirá.
No es mañana cuando deberías estar haciéndolo. ¡Apresúrate antes de que raye el alba! Después será el momento en que, todo ser humano, deberá sentirse realizado por completo.
Seguidores
lunes, 28 de abril de 2014
Para cuando te acuerdes de mí

lunes, 14 de abril de 2014
Ahora que he vuelto
Ya han pasado muchos años,
Y mi
ausencia, demasiado se ha notado.
Ahora que he
vuelto, toma mi
corazón y estrújelo.
Abrázalo de la manera más fuerte que puedas, para que
jamás tenga que volver a partir.
Toma lo que
queda de mi alma y cúbrela con delicadeza y amor.
Y cuando
estés en contacto con mi piel, entenderás por todo el dolor que he pasado, y aprenderás de aquel sufrimiento que, una vez me visitó y nunca más se marchó.
Te extrañé con tanta desesperación, que creí que me estaba muriendo de desolación.
Al fin sabrás lo duro que fue para mí tener que dejarte aquí, mientras que yo me tuve que ir.
Me he vuelto
mucho más fuerte, y de una pequeña burbuja tuve que salir.
Porque tuve que acostumbrarme a ser alguien diferente, para salir a comerme al mundo, antes de que el mundo me devorara a mí.
Pero ahora
que he vuelto, no puedo seguir fingiendo ser una piedra.
Ya no puedo pretender ser de metal, cuando por dentro, en realidad, me estoy oxidando despacio.
Tanto llanto
dentro de mí, y al fin lo
puedo liberar sin tenerlo que frenar.
Tanta angustia por dentro, y al fin la puedo desahogar.
Ya puedo estar en calmar, sin tenerle miedo a la soledad.
Toma mi
corazón, siente como se va por los cielos.
Y no es por
tristeza, es por felicidad.
Estoy por doblagarme al llanto
más dulce que no he probado jamás.
Volver a verte
fue mi antídoto, la cura de mi grave enfermedad.
Ahora que he
vuelto, entenderás
que para mi nada fue fácil.
Que he caído
miles de veces en las fosas de la vida, en el transcurso de mi andar,
Y fui prisionero, de muchas cárceles de mi mente, en las que yo mismo me hice encerrar.
Y tan sólo, pensando en ti, me bastó para poder continuar hasta el final.
Toma mi
corazón y acarícialo.
Cuélgate de esta hermosa emoción, y seamos uno como antes.
Sigamos el
film de la película que un día abandonamos por la mitad, y volvamos a revivir las apasionantes escenas juntos, tú y yo.
Ahora que he
vuelto, solamente amor de
ti espero
¿Qué
esperabas? ¿Qué contenga todo mi amor?
Solo quiero
enredarme en tu cuerpo,
Y encender
el extinto fuego salvaje que bajo las sabanas se quedó.
En el
transcurrir de mis años, se me ha
olvidado regar el amor para que no se marchitara aquella vieja ilusión.
Me he negado a huir de este avismo, y dejé de lado mi paraíso.
¡Créeme cuando te digo que ya he escarmentado bastante, estando lejos de ti!
He pagado mi
deuda con el tiempo,
Y he
cumplido con los requisitos que la soledad me indicó.
Amarte, solo
quiero amarte, toda una eternidad.
Ahora que he vuelto, y ahora que
puedo.

Si supieras
Si supieras
lo que sufro por vos.
Si supieras
cuanto desearía en este momento tenerte.
Amor inmenso
es lo que siento,
Y son pocas las veces en las que solamente puedo verte.
Tú vives sin
rumbo por el mundo,
Y no sabes
que existe algo mucho más fuerte.
Derramo lágrimas por ti cada noche,
Por tu amor
que me quema como fuego ardiente.
Tanto te
extraño que no basta una mirada.
Ni siquiera
alcanzaría todo un día.
La intención
que tengo es muy distinta.
¡Es la de
amarte el resto de mi vida!
Me desespero
porque no te acuerdas,
Me desespero
y te llamo.
No puedo
aguantar escuchar tu dulce vos,
Y si lo
haces, en pedazos me desarmo.
Quita la
venda de tus ojos.
Observa que
realmente te amo.
Toda una
vida esperaría con tal de
que ahora estés a mi lado.

Suscribirse a:
Entradas (Atom)