Seguidores

miércoles, 10 de octubre de 2018

Obras sangrientas

Te conocí en una vida pasada, y no sabías, que llegaría a tu corazón.
¡Oh sí, a tu tierno y rojo corazón!
Sé que cruzamos miradas, y que mi hechizo funcionó.
Te dejaste llevar por tus instintos, y te has rendido a mis pies sin vacilación.
No pudiste detener toda esta locura,
Y yo no pude evitar escuchar el susurro de aquella voz.
No me quedó más remedio, que la de acariciar tu piel, mientras asomaba el hermoso filo de mi hoz.
Sé que te asustaste cuando te sonreí,
Sé que gocé cuando te martiricé por primera vez.
Fuiste mía, y está sensación extraña, me carcome la piel.
Mis demonios me lo gritan, mis instintos me torturan. Saben que también, te portarás muy bien.
Eres el Déjà vu, de mis locos sueños, y siento que está noche nos divertiremos como aquella vez.
No dudes de mis intenciones. Deja que le de comienzo a tu sufrimiento.
Este final ya fué escrito, y la historia se volverá a repetir. ¡Así que, comencemos!
Nuestras almas están destinadas a estar juntas. ¡Creeme, no soy de mentir!
No te acordarás de mí, hasta que a este juego sádico, no le ponga fin.
Y cuando te atraviese con mi daga, gritarás para mí.
Hazme caso, eres mi Déjà vu. Y lo que ahora está por culminar, pronto volverá a ocurrir. Cuando nos volvamos a ver. Cuando de nuevo, te toque morir.
Y cuando se cierre el telón, firmaré con mi nombre, mi gran obra maestra.
Y Me llevaré tu corazón, que guardaré en mi colección de obras sangrientas.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario