No sabes cuanto poder radica en mí. No sabes que la inocencia enmascara la fortaleza que embestirá cada vez más fuerte. No subestimes a esta energía cósmica, que brota desde el aprendizaje de cada derrota.
Soy a prueba y error... Soy cada vez mejor... mi auténtico mentor...
Soy la fuerza bruta, que recubre al estratega que refuerza mi bastión. Soy mi propia superación... mi propio salvador.
No es mañana cuando deberías estar haciéndolo. ¡Apresúrate antes de que raye el alba! Después será el momento en que, todo ser humano, deberá sentirse realizado por completo.
Seguidores
viernes, 14 de junio de 2019
Verso XXXI
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario